Vivir es elegir
Qué difícil elegir
Entre tantas opciones posibles
Lo que quieres, lo que puedes, lo que debes
Saber discernir.
Y no arrepentirte después
del camino seleccionado
cuando no resulta acorde
a lo celosamente esperado.
Pues el instante no viene dos veces
pero la conciencia recapitula
puede cambiar el rumbo
una y cien veces
al estar atento, al estar despierto.
Por eso querido amigo,
No te arrepientas de lo vivido,
Cuando una lección habrás aprendido.
Arremete con coraje
La próxima elección que sea a ultraje
Con firmeza y decisión
Habiendo estudiado con precisión
El más interior anclaje.
Silvia Munton