Nada
Como Alicia en un laberinto de espejos,
Intento encontrarme en cada reflejo.
Solo encuentro fragmentos distorsionados,
muecas incontrolables que se burlan de la seriedad,
de la ilusión de continuidad,
arrugas cual cordilleras producto de movimientos sísmicos,
Fallas y desplazamientos tectónicos
de placas que vuelven a asentarse en otro lugar,
dando la impresión de un nuevo paisaje, ahora sí,
actual, moderno, realizado,
sólo para sufrir nuevos embates climáticos,
erosiones externas, vulcanismos internos.
Todo cambia, nada permanece.
Es decir: NADA permanece
La Nada sí permanece.
La nada que me acompaña siempre
La nada que se puebla de nuevos fantasmas y seres imaginarios
que vuelven a caer como castillos de naipes
ante las cada vez más frecuentes brisas
que aligeran y no permiten acumular el nuevo polvo.
La Nada que ve las estrellas
Y SONRIE a pesar de ella.
Silvia Munton
mayo 2014